y asi es como llego al cuara con 10 centavos... sin ganas.
sin ganas de pelear con nadie. sin ganas de discutir. sin ganas de forzar nada. sin ganas de nada infructuoso, viendo el reloj y esperando. es agridulce; pero he estado enfocandome mas en lo agrio y amargo que en lo salado y denso que hallo el dulce algo empalagoso.
no me puedo o mas bien no me debo quejar. he logrado vivir hasta aqui haciendo cosas increibles y que pensaba imposibles hasta antes de caer en cuenta de ellas. vivir de hacer música, dar clases, tocar, grabar, dar asesoría, servir de puente para que cosas buenas sucedan, unir a la gente, difundir una mejor idea de lo que somos, lo que podemos llegar a ser; compartir la vida. trato de ser util en casa, aunque a podría ser mejor,
debo ver esto con más calma, una vez llegado a este punto, todo lo que querias llegar a ser probablemente lo es o esta en su fecha tope. ya se alimenta el miedo al Hubiera pero en cantidades de camion en camion. muchas lecciones valiosas del pasado cobran eco exponencialmente, y empiezas a tomar todo con una dulzura y otro enfoque por todo esto... que ya cada vez más respiras sabiendo que no es un estado permanente. que despues podras hablar de ello conjugando en 1era 2da y 3ra persona en tiempo pasado. valoras mucho más a todas las personas de cada etapa de tu vida, en especial las que te vieron en tus peores instancias. las recuerdas con otra emocion cada vez mas nostálgica.
dias atrás caminé por donde fue la casa de mis abuelos, un inmueble al lado de la presidencia de la republica, donde viví mi primer año de infancia con mis padres hasta que nos mudamos a chorrera, donde crecí. era el ritual de fin de semana: venir a Panama durante muchos sábados con mi hermano, y a veces hasta mi papa tambien venia, cuando no estaba pescando. veníamos en bus y nos bajabamos en la 5 de mayo por la estación que ya no existe de SACA, y luego, años despues fue en 5 de Mayo, y años despues en el Chorrillo. ya yo aprendí a ir a Panamá solo para antes de que empezaran a Construir la terminal de Albrook. pero usualmente significaba en la central(con el machetazo como parada usual en el tour, y lo juro sigue igual a como la recuerdo, y siempre voy al piso de audiovisual, todavia) y caminar hasta la presidencia y llegar a visitar a mi tio y su imprenta donde me recreaba con las maquinas y su mantra de engranes y rodillos y me deleitaba ver las páginas convertirse en documentos en un proceso sin fin... el olor a tinta y a goma. el trabajo que parecía interminable... la repetitiva labor de compaginar a mano... la televisión sony que tenia botones que se hundian para cambiar de canal y donde casi siempre, o habia fútbol, o estaba telemetro o canal 4. el Hyundai Excel color Champaña con luces cuadradas y neverita en el asiento de atrás de mi tio! yo admiraba( y aun lo hago) mucho a mi tío Carlos, era empresario y era su propio jefe, aunque mucho despues entendi que la empresa era entre la familia. no creí que fuera millonario, pero creí que era Rico. que va. nunca tuvo miles. pero es educado, todo el mundo rie con el, iba de vacaciones, mi primo y mi tia se veian contentos siempre. mi primo fue a una mejor escuela que yo.
yo pensaba, "wao! cuando quiera grande quiero ser como el, pero no en esto. es muy aburrido"
creci teniendo esto y las visitas a mi bisabuela, que vivió arriba, a la derecha, entre unas puertas de madera y un lugar pequeño pero acogedor, de madera. al fondo había un baño que parecia salido de Grand Budapest Hotel, y vivia una señora muy elegante, que siempre saludaba a mi madre y a mi, pero parecía una persona de mal humor pero nunca con nosotros.
mi tio vivia en un cuarto al que se llegaba por un pasillo en zig zag, donde habían 2 puertas, y nunca sabré que había a la izquierda, pero llegados a la derecha, había un cuarto de una sola habitación sin baño, con 2 ventanas que daban al claro en medio del edificio, y tenia unas plantas en el florero. una nevera amarilla con pecas de oxido, otra máquina de imprenta que nunca sabré como llegó hasta allí y la televisión... tocadiscos donde ponía el Soul Train, earth wind and fire, Bee Gees y combos nacionales, entre otros. y una alcancía llena de centavos en forma de un crayón gigante entre las cosas que recuerdo del orden bastante peculiar, que habia alli. había bastantes cosas y habia que buscar como sentarse, pero todo parecía tener un lugar. para mi. supongo para el también. era hermoso.
me transporto a esos recuerdos y caigo en una nostalgia que me arranca suspiros en disimulo. debo enfocarme en mi clase, pero siempre tengo esos flashbacks que me alegran la vida. epifanía le dicen. a mi me dió alegría y paz el poder viajar a esos instantes. esos encuentros con la nostalgia me hacen darle otro toque a mis días. quiero recordar días como estos en los que estoy teniendo algo tan bueno o tan bonito cada vez que cuando llegue el momento que solo queden recuerdos, sean historias buenas. aun no puedo librarme de las cosas que me duelen. un amigo que se fué, y las circunstancias que quedaron de eso hacen eco aún. un amigo que deja de ser amigo, porque cambió. la nueva versión de si mismo me es deprimente pero, no puedo hacer nada y toca aceptar lo que es y lo que puede ser. no puedo hacer nada.
o el otro que decía ser mi amigo... y finalmente mostró de que esta hecho. del hipócrita, envidioso y egocéntrico que resultó ser. duele entregar confianza en alguien y recibir como pago semejante respuesta. como cambia la gente cuando ya no te necesita. fuera.
el tiempo me ha dado mejores días, mejores amistades, mejores cosas por las cuales vivir y soñar. estoy en bandas increíbles! entre buenos amigos y gente de confianza, haciendo música que me estimula. colaboro con gente genial, enfocada, hago música que me llena.
y bien me aterra vivir, pero cada vez que salgo en trip de montaña recuerdo que parte de la emoción de la aventura, es el sentir miedo. llegado el último suspiro, es el fin de toda sensación de miedo, de la liberación final de este personaje y la reintegración a ser uno con el todo. vivo por que ese equipaje de emociones y recuerdos sea lo único que realmente me escude de enfrentar el ultimo suspiro, con miedo.
